- Los ETFs de Bitcoin al contado captan interés inversor, sumando $3.89 mil millones en capital frente a salidas en oro.
- El oro disminuye un 3.4% en valor este año, mientras Bitcoin crece un 23.5%, destacando cambios en preferencias de inversión.
El año 2024 ha marcado un viraje interesante en las preferencias de los inversores, destacando especialmente en el sector de los fondos cotizados en bolsa (ETFs) de oro y Bitcoin.
Mientras observamos cómo $2.4 mil millones abandonan los ETFs de oro, los ETFs de Bitcoin al contado captaron la atención de nuevos inversores, reflejando un ajuste en las estrategias de inversión digno de exploración.
Focalicemos inicialmente en el oro
Históricamente, ha sido considerado un refugio en tiempos de incertidumbre económica. Sin embargo, este año, hemos sido testigos de una salida significativa de fondos de los principales ETFs de oro, particularmente de los productos de iShares.
Esta situación envía una señal de alerta sobre un cambio en la percepción de seguridad y valor del oro. Por otra parte, los ETFs de Bitcoin al contado, que recientemente recibieron luz verde, están experimentando un aumento en las inversiones, sumando un total de $3.89 mil millones en capital nuevo y registrando volúmenes de negociación históricos.
¿Qué motiva este giro en las tendencias de inversión?
Esto no se reduce simplemente a una transferencia de fondos de oro a Bitcoin. Lo que presenciamos es un sistema más complejo, donde la búsqueda de oportunidades de inversión frescas y la revalorización de Bitcoin frente al oro juegan roles fundamentales.
El atractivo por las acciones estadounidenses y el temor a quedarse fuera de lo que está de moda también tienen su importancia en este cambio, según apunta Eric Balchunas de Bloomberg Intelligence.
Esto ocurre en un momento donde el oro ha disminuido un 3.4% de su valor desde el inicio del año, alcanzando su punto más bajo en dos meses. En contraste, Bitcoin ha experimentado un ascenso del 23.5% en el mismo lapso, alcanzando niveles no vistos en dos años. Esta diferencia en la trayectoria de ambos activos no solo refleja las variaciones del mercado sino también un cambio en cómo los inversores valoran estos activos.
Contrario a las expectativas de que el oro superaría a Bitcoin este año, los acontecimientos actuales sugieren otra realidad. La lucha por ser visto como el activo preferido en tiempos de inestabilidad económica y conflictos geopolíticos se ha intensificado.
Aunque Bitcoin y el oro comparten características como reservas de valor, es evidente que las dinámicas de inversión se están redefiniendo, con Bitcoin atrayendo a aquellos interesados en diversificar sus carteras más allá de los activos convencionales.
La complejidad entre el rendimiento de estos dos activos señala un cambio más amplio en el mercado de inversiones. Con los bonos del Tesoro a largo plazo y el dólar estadounidense enfrentando desafíos propios, muchos inversores están ajustando sus estrategias de inversión.
Entonces, ¿qué implicaciones tiene este cambio de dirección para el futuro del oro y de Bitcoin? Mientras algunos ven en Bitcoin una moda pasajera, otros lo consideran un avance en la búsqueda de seguridad y valor.
Estamos ante un momento decisivo, donde las decisiones de inversión se basan no solo en rendimientos históricos sino también en las expectativas de estabilidad y crecimiento a futuro.
It looks like another classic pump-and-dump is going on with #Bitcoin and the @exchangeETF. The four-day conference kicked-off on Super Bowl Sunday and ends on Valentine's Day. There's a lot of hype surrounding the newly listed #BitcoinETFs. I wonder when the massacre will begin.
— Peter Schiff (@PeterSchiff) February 12, 2024
Esta situación también plantea preguntas sobre la posición de inversores tradicionales en oro como Peter Schiff, conocido por su crítica hacia Bitcoin. La ironía de este cambio no pasa desapercibida, especialmente al observar las comparaciones gráficas entre ambos activos compartidas por figuras destacadas en el sector de Bitcoin.
